¿Cómo funciona el cobro de morosos particulares?
Reclamar las deudas entre particulares es una acción necesaria que se presenta muy a menudo, pero que puede ser más complicada de lo que parece. El cobro de morosos particulares puede presentarse en varios contextos o situaciones y cada una tiene su forma legal de proceder para reclamar el cobro.
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Deudas de palabra
Las deudas con particulares suelen presentarse entre familiares, amigos, vecinos, compañeros de trabajo y otros conocidos, donde muchas veces se omiten los documentos que demuestren el préstamo de dinero.
Son deudas que se negocian muchas veces solamente con la palabra o promesa de pago. En esos casos, el principal obstáculo es la falta de papeles que demuestren la deuda. Cuando no se tienen pruebas, lo mejor es resolver el cobro mediante negociaciones que busquen la mediación y aceptación de la deuda de parte del moroso.
Deudas particulares con transacciones
Cuando se realizan préstamos con pago vía transferencia bancaria, el cobro de morosos particulares, al menos, cuenta con un precedente que demuestra que se prestó el dinero y se puede reclamar la deuda con mayor facilidad, aunque no haya documentación formal como un contrato.
Otras pruebas de préstamo son los mensajes de texto o correos electrónicos donde se acuerden los términos de la transacción. Pese a que lo más recomendable para reclamar es contar con documentos que prueben la deuda, este tipo de pruebas sirven para que el deudor reconozca la deuda y hace más fácil la mediación y el cobro.
Deudas con contrato privado
Cuando se presta dinero a amigo, familiar o conocido a través de un contrato privado, puede parecer como una falta de confianza, pero en realidad es un acuerdo donde se estipulan las condiciones en las que se presta el dinero, los plazos determinados de pago y donde las partes están de acuerdo en las formas de pago, lo que evita problemas posteriores.
Este tipo de contrato suele incluir datos como el pago de intereses por la cantidad de dinero prestada o en caso contrario, dejar claro que el acreedor no está interesado en el cobro de intereses, pues se trata de un préstamo entre familiares o amigos.
Cuando el deudor no paga lo prestado, el acreedor puede cobrar desde el momento que el deudor incumple con su obligación de pagar el préstamo. Las acciones legales que puede realizar el prestamista para el cobro de morosos particulares, tiene un plazo de prescripción de cinco años, a partir desde el incumplimiento de parte del deudor.
Deuda con reconocimiento
Un acreedor puede apelar al reconocimiento acordado de la deuda, de manera oral o vía escrita.
Por escrito puede realizarse de manera unilateral o con documento privado o público ante un notario.
El deudor acepta la deuda y elementos del contrato original del préstamo, de lo contrario debe demostrar que las condiciones del primer préstamo estaban viciadas. Cuando se firma un reconocimiento de deuda, se deben tener claros los términos del contrato original y asegurarse de su conformidad, se acepta cantidad, plazos de pago, pago de intereses y otros aspectos.
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