En aras de reducir el riesgo de impago, tanto fabricantes como proveedores o mayoristas, están anteponiendo el cobro de facturas bajo mínimo riesgo a la captación de nuevos clientes desconocidos.
El clima de desconfianza financiera que atravesamos actualmente en nuestro país hace de las administraciones de las empresas verdaderas trincheras contra la morosidad empresarial.
La no tan buena medida de las nuevas normas 19 Sepa quizás no sean del todo suficientes para evitar los impagos de recibos al vencimiento ya que el cliente con no estar conforme con el mandato de pago ya puede ordenar la devolución del recibo girado por banco.
Ante tal situación de incertidumbre de cobro, las medidas pasan a ser drásticas y se están empezando a dirigir a solicitar pagos por adelantado cómo condición necesaria a la entrega del material.
Parece que por las malas prácticas de pago de unos pocos acabarán pagando muchos pero esta sin duda será la tendencia de los próximos años en los que las empresas con intención de evitar los impagos en la empresa, premiarán con descuentos a aquellos clientes cuya forma de pago sea por adelantado.