Cómo venimos observando durante los últimos meses, cada vez es mayor el número de propietarios que no atiende a sus recibos de comunidad.
Muchísimas administraciones de fincas y comunidades de vecinos españolas han recurrido y siguen recurriendo a Cobratis para combatir los problemas de morosidad que plantean aquellos propietarios morosos que no atienden debidamente a sus obligaciones de pago con la comunidad.
Cobrar la deuda de un vecino moroso debe de pasar por varias fases de gestación antes de decidir actuar por una vía procedimental ya que en muchas ocasiones es posible que el impago de la deuda sea involuntario. En este sentido cabe señalar las segundas residencias o residencias vacacionales en las que hay poca asistencia a juntas de vecinos y en ocasiones los presupuestos firmados no entran dentro del presupuesto habido en cuenta del propietario que resulta ser moroso.
En primera instancia, la administración de fincas deberá de notificar propietario moroso la deuda por correo y también preferiblemente por la vía telefónica y explicarle la situación de deuda acumulada con la comunidad.
Ante una actitud de impago recurrente por parte del deudor será cuando se aprobarán en junta las acciones a emprender contra determinados propietarios que tienen un saldo pendiente con la comunidad, y en última instancia ceder la gestión del cobro de la deuda a un gabinete jurídico o entidad especializada con es Cobratis España.