La morosidad de las administraciones públicas madrileñas con sus contratas "supera el 20%" y "triplica, como mínimo, la morosidad financiera de España, que se sitúa en torno al 7,5%". Así lo estima la Federación de Servicios (FES) de UGT Madrid ante la ausencia de datos oficiales y denuncia "los graves efectos que para las plantillas está ocasionando la práctica de demorar el pago" del trabajo que realizan.

Esta situación "es inadmisible", según el secretario general de la FES, Roberto Tornamira. "Yo creo que es la hora de que la señora [Esperaza] Aguirre [la presidenta de la Comunidad de Madrid] deje de esgrimir una situación económica idílica que es falsa", asegura.