Los datos ponen cara a los difíciles tiempos que les toca vivir al sistema financiero. Los créditos dudosos de la construcción y del sector inmobiliario alcanzaron en junio los 48.434 millones de euros, superando el total de la financiación que las entidades financieras han otorgado para la adquisición de bienes de consumo duradero, 44.812 millones.
La morosidad del ladrillo no tiene freno. A pesar de las múltiples iniciativas que los bancos y las cajas han tomado para contener este fenómeno, entre ellas los canjes de activos por deuda, la tasa de impagos del sector continúa al alza. En junio, según los datos del Banco de España, la dudosidad de los promotores inmobiliarios se situó en el 11,21%, mientras que la de los constructores se fijó en el 9,88%. Un año antes, ambas tasas estaban en el 8,17% y el 7,82%, respectivamente
Fuente: Expansión.com