A pesar de la reciente reforma en la ley de arrendamientos urbanos, la morosidad en el pago de alquileres sigue aún creciendo.
Algunos inquilinos siguen buscando escusas para no pagar o bien permanecer en la vivienda haciendo pagos irregulares. Aunque la reforma legal ampara a los propietarios, éstos en su mayoría prefieren no tener que recurrir a los deshaucios express en aquellos inquilinos que hacen pagos (por pequeños que sean), ya que esto supondría un ingreso menos por pago de renta.
Alquilar hoy en día con garantías es dificil y por ello se hace necesario quizás una bajada en los precios para tener mayores opciones de alquiler y así poder filtrar mejor la vivienda y el inquilino. Cierto es que aunque para la gente joven que desea acceder a la vivienda, la compra sigue siendo una opción generalmente impensable, el acceso al alquiler sigue siendo aún a precios por encima de la oferta y demanda real del mercado.