El impago de penalizaciones por permanencias alcanza ya tales volúmenes en las empresas de telefonía móvil de nuestro país que muchas de estas entidades ya cuentan con entidades externas dedicadas al cobro de estos impagos.
Las deudas de este tipo suelen oscilar entre los 100 y 500€ y suelen devengarse de impagos de penalizaciones por bajas anticipadas de contrato, estas deudas llegadas a ser reclamadas por la vía judicial se gravarán con el interés legal por mora.
Posiblemente una futura solución para este problema de impagos sea la de pactar varias compañías un registro común de incidencias de cobro cuyos datos cruzarán y con carácter de obligatoriedad tenga que ser liquidada la deuda pendiente para poder traspasar la línea a otra compañía.