El mercado descuenta una próxima intervención del BCE en la deuda pública. De ahí que el diferencial entre la deuda española a dos y diez años se amplía a cifras récord. La brecha se dispara por encima de los 350 puntos básicos.
Nunca antes en la serie histórica de Bloomberg, iniciada en el año 1993, el diferencial entre la deuda española a dos años y la de diez años había sido tan amplio como la que refleja hoy el mercado secundario.
La más que posible intervención del BCE dispara esta brecha. Los analistas coinciden en que las compras de bonos se centrarían esta vez en la deuda a más corto plazo, no superiores a los tres años, con el fin de aliviar las tensiones a corto. La deuda a más largo plazo, como los bonos de referencia a diez años, se quedarían fuera de este programa.
De ahí que los inversores opten también por tomar posiciones en los tramos de la deuda que podrían ser objeto de las compras que ultima el BCE. El resultado es que el interés exigido al bono a dos años se desinfla hoy casi 30 puntos básicos, a sus cotas más bajas desde inicios del mes de mayo, al 3,2%.