A menudo ocurre que en el ámbito administrativo de la empresa, el desarrollo de toda una serie de tareas administrativas diarias, suponen un abandono de aquellas labores orientadas al cobro de deudas derivadas generalmente del impago de facturas vencidas y no abonadas.
La externalización del cobro de este tipo de deudas a menudo es más que suficiente si este se cursa únicamente de modo subcontratado a través de una entidad externa dedicada al recobro de impagados.
Si además contamos con una solución online que nos permita disponer de un cobro de deudas extrajudicial, quizás podamos dinamizar los procesos de recobro de deudas en nuestro negocio y evitar muchos procedimientos judiciales innecesarios.
Uno de los errores más comunes suelen ser el de la instancia de un procedimiento judicial para el cobro de cualquier tipo de deuda sin que previamente haya sido intentado su cobro por vías extrajudiciales.
Lo ideal para cualquier tipo de negocio sea cual sea su tipología y dimensiones es afrontar la recuperación de impagados siempre de un modo secuencial; es decir, inicialmente cursando la reclamación de las facturas impagadas por vías extrajudiciales, acudiendo a la vía procedimental sólo si es estrictamente necesario.