Los impagos provocados por la crisis suman 112.000 millones. La cifra sería más alta si no se hubieran engrasado dos herramientas de gestión de la mora: las refinanciaciones y la compra de pisos.
El sector financiero sigue batallando contra la morosidad. El crecimiento de los impagos se ha ralentizado y su techo podría alcanzarse a finales de este año, pero atrás quedan 112.000 millones de euros de dudoso cobro tras tres años de crisis.
Fuente: Expansión.com