Final de verano suele ser una época en la que las empresas y profesionales con saldos acreedores reestructuran su contabilidad y planifican estrategias para el cobro de deudas impagadas. Son muchas las empresas que han dejado la asignatura del cobro de clientes morosos para recuperar en septiembre ya que en verano muchos de los acreedores han dejado de reclamar sus facturas pendientes de cobro. El inicio de septiembre coincide también con la apertura del nuevo año j

El sector dedicado a la reparación y mantenimiento de todo tipo de embarcaciones náuticas ha sufrido una fuerte avalancha de impagados durante los meses de julio y agosto de este año en los que hemos notado un fuerte incremento de solicitudes de cobro de deudas en este sector. Generalmente los meses de verano son en los que crece notablemente la demanda de reparaciones de barcos y por tanto los impagados también suponen un fuerte repunte durante estos meses.

Generalmente muchas de las empresas cuya actividad se detiene o se disminuye notablemente en el mes de agosto no tienen demasiado claro si reclamar las deudas de clientes a la vuelta de vacaciones o no. Aunque en agosto se encuentren inhabilitados los juzgados, no interfiere este hecho con la eficacia de la reclamación previa extrajudicial, es más, en muchas ocasiones la bajada de actividad empresarial permite tratar este tipo de reclamaciones de forma más efectiva.